jueves, 25 de agosto de 2011

Necesito de ti ...

necesito esa mirada tuya, tan profunda y tierna...
que lo dice todo en medio del silencio...

necesito esa mirada tuya, que eleva mi alma...
e inunda mi ser, sin tocar aun mi piel...

necesito esa mirada tuya, tan indescriptible...
que llena de amor a este libre corazon...

necesito esa mirada tuya, tan profunda y tierna...
que me lleva a entender, que aun estoy viva y siento!...

Necesito esa mirada tuya...

i miss you...

sábado, 13 de agosto de 2011

notwendig


muss alles geben und nichts bekommen?
brauchen das Gefühl, ...
müssen trauern?
muss leiden?
muss verlieben?
ist notwendig, um zu leben?
wir sterben müssen?
wissend, dass alle an einem gewissen Punktgeändert ...





lunes, 8 de agosto de 2011

(?)

Me encuentro en esta telaraña otra vez. Las frágiles telas que me acompañaban
Han desaparecido desde la noche anterior. Hay rastros de un amargo sabor del alcohol en mis labios Y en mis manos se encuentra el rocío De la tristeza que llore ayer. Me he quedado aquí, atorada en este patético y trágico escenario donde solo hay sombras de un lado a otro. Oscuridad que grita en silencio y antiguas heridas que aun no dejan de sangrar. Los estragos de mi adicción me han hecho perder el equilibrio. Y he perdido algo más que el suelo. La misma cordura que alejaba mi cabeza de las estrellas.
¿Hacia dónde correr? ¿Hacia huir? Todo se limita a 4 esquinas y una prisión de frágiles hilos enredados sobre mi  piel. Solo espero que llegue aquel miedo dominante y me trague sin piedad...Para así dejar de existir. Movimientos oscilatorios en mi mente y en este lugar. Eres tú, tratándome de despertar. No dejes de intentar. Arráncame de aquí y abrázame Como abrazabas al sol, El día que te conocí.

sábado, 6 de agosto de 2011

Solo...

Quédate, déjame respirar tu delicado aroma, tan suave como los lirios de la primera amante.
Esas pupilas reflejan la noche y la Luna las cela.
La unión del primer amor me incita a jugar.
Mis dedos pasean entre los hilos tentadores hechos de estrellas que tiene tu cabeza. Aquellos que me hacen diario naufragar.
Haz de esta noche aun más oscura y regálame una mirada, y no diré nada, solo observare y te anhelare.
Regálame tu silencio que hace nuestras manos juntarse por acto natural de las cosas, y no te soltare.
Acerca tu respiración a la mía, acelera mi corazón, y cerrare los ojos.
Emite las 2 palabras del infinito de tus labios, y no me moveré, pero las sentiré en los míos

jueves, 4 de agosto de 2011

Yo Bese Al Diablo....

Así es, Yo bese al Diablo.
Lo conocí en un lugar común, con gente común, con un prejuicio común.
Éramos muy parecidos, casi iguales...
Me miraba a los ojos, pero yo no podía corresponderle en ese instante, y aun así, no dejaba de mirarme.
Yo no me percataba, pero me seguía a todas partes. Yo no lo sabía, pero me devoraba con su mirada.
El tiempo pasó como las larvas de un cadáver, como el frio en verano. Me encontré sola, sin nadie más a mi lado, llorando hasta ver salir el astro rey, hasta ya no tener más agua que sacar.
El frio del suelo me obligo a levantarme, y la luz brillante del amanecer me forzó a abrir los ojos.
Y ella estaba ahí, justo enfrente de mí. Era tan igual, tan hermosa, tan perfecta.
La vida seguía y mi mente vagaba como adolescente rechazada.
La vida seguía, y rápidamente mis muñecas comenzaron a borrar las heridas que me recordaban el pasado.
La vida seguía, y nosotros también.
Juntas, solas, con la sabana oscura rodeándonos con sus enormes brazos . Ahí, probé el sabor del infierno.
Yo bese al Diablo.
Y no me arrepiento. Día con día lo volvía a hacer, y día con día la adoraba más que a mi vida.
Por primera vez sentí lo que era ser amada, con mi frialdad y con mis zapatos sucios. Con mis ojos y mi cabello siempre tan desordenado.
Mi mano sentía lo que nunca percibió de alguien más.
Y mire en sus ojos la eternidad, la ira, y un destello de humildad.
Yo vi al Diablo llorar.
Los días continuaban bajo el baile del Sol y la Luna. Las estrellas siempre tan puntuales nos veían besar.
Nos veían unidas en el erotismo, el dolor, el fuego y los abrazos.
Solo ella sabia mi miedo a la oscuridad.
Me incitaba a jugar con el mal, a retar a la muerte, me provocaba a los momentos prohibidos.
También me hacia llorar, padecía su ira. Pero me resignaba a verla cabizbaja pidiendo perdón.
Me dejaba ser yo.
Yo bese al Diablo. Y lo volvería a hacer.
Así como fue ayer, así como será mañana.
Así como será siempre
Yo bese al Diablo.
Y me enamore de él.